RIBEIRA – Precio a la cabeza del chivato

El “Rufino” detenido en su Mercedes con 660 gramos de cocaína trata de localizar al que lo traicionó alertando a la Policía Nacional

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Jorge Fernández Regueira, uno de los hermanos “Rufino” de Castiñeiras, salió a las diez y veinticinco de la mañana de este viernes de los calabozos de la Policía Local de Ribeira, en donde pasó la tarde y la madrugada previas, después de que se abonasen en una entidad financiera los 1.000 euros de fianza que le puso la juez para eludir la prisión provisional que había dictado contra él por un delito de tráfico de drogas, algo que no pudo hacer en la tarde del jueves al estar los bancos cerrados al público. Lo primero que hizo este vecino de Castiñeiras de 35 años al quedar en libertad fue presentarse en la comisaría y en los juzgados para lograr que le facilitasen el teléfono de la persona que le delató cuando llevaba 660 gramos de cocaína en un Mercedes que, al parecer, le había prestado un amigo al tener el suyo averiado, y que supuestamente transportó esa mercancía desde el entorno de Santiago de Compostela hasta la capital barbanzana, donde fue interceptado por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía. No lo consiguió, pero parece que no va a desistir fácilmente de sus intenciones y se podría decir que ha puesto precio a la cabeza del que considera un chivato.

Lo que no deja de sorprender a los ribeirenses es la exigua fianza de 1.000 euros que la autoridad judicial acordó imponerle para que pudiera quedar en libertad pese a que se le intervino una cantidad más que considerable de droga, que una vez preparada un colocada en la calle equivaldría a varios miles de dosis con un valor económico que superaría los 100.000 euros. Incluso, el propio imputado no pareció salir de su asombro al compararla con la medida cautelar que cumplió en su anterior detención en febrero de 2014 por un delito similar, cuando la droga que le incautaron fue inferior a la de ahora y cumplió seis meses entre rejas.

Sin embargo, esto no es lo es lo único que sorprende en diferentes sectores, pues también hacen referencia a las intenciones que pudo tener la persona que presuntamente traicionó a “Rufino”, avisando a la Policía Nacional sobre la cantidad de cocaína que el ahora imputado llevaba encima. Algunas fuentes a las que ha tenido acceso este periódico apuntaron ayer que el delator pudo usar a “Rufino” de señuelo para desviar la atención de los efectivos de las fuerzas de seguridad y poder introducir una mercancía muy superior de sustancias estupefacientes por otra vía de entrada a la capital barbanzana. De hecho, manifestaron que los narcotraficantes ya recurrieron a ese mismo sistema en anteriores ocasiones ya que, pese a que la Policía Nacional asestó golpes importantes contra el tráfico de drogas en el municipio ribeirense, el mercado de esas sustancias estupefacientes nunca llegó a estar desabastecido “e por algún sitio ten que entrar”, matizaron.