A POBRA – Playas caídas en descrédito

La pérdida de la bandera azul en Cabío-Lo,biña y A Illa cae como un jarro de agua fría entre los bañistas

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El duro golpe que el turismo de A Pobra ha recibido con la pérdida de las dos banderas azules que la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac) le había vuelto a otorgar este verano a las playas Cabío-Lombiña y A Illa. ha caído también como un jarro de agua fría entre los habituales bañistas de esos arenales, acostumbrados a ver como ese distintivo los presidíia y daba lustre. De hecho, muchos de ellos notaron una afluencia inferior a la de los últimos días, que creen que pudo estar motivada por la mala publicidad que ha supuesto ese castigo o sanción por no cumplir con las mínimas exigencias.

Una familia de Oviedo, que viene desde hace varios años a veranear a esta localidad barbanzana le indicó a la redacción de «loqueyotedigo» que desde su llegada echó de menos la presencia de los socorristas, pues creía que estarían desde el 1 de julio, algo que no se cumplió, y añadió que los baños estuvieron cerrados, salvo algún día de manera puntual. Sus miembros añadieron que la bandera azul por si sola no da
seguridad, pero la gente la identifica con unos servicios, por lo que al no haberlos se sienten «defraudados». A juicio de una pareja llegada desde Castilla-León, no se puede comprender que se quiera justificar el retraso en la contratación de los socorristas en el hecho de llevaban menos de un mes gobernando y que la concesión de las ayudas la recibieron hace escasas fechas, “pues eso ha pasado en otros muchos municipios en donde cambió el partido político en el poder y han hecho los deberes, considerando una prioridad la seguridad de los  bañistas”. Y añadió que si el Ejecutivo local tenía problemas debería haber pedido una prórroga, pero no tratar de engañarles a ellos y a la Adeac.

Tanto los asturianos como los leoneses indicaron que  que durante casi dos semanas tuvieron que soportar la falta de limpieza de los arenales y la abundante maleza. Por ello, piden a los gobernantes que se dejen de lavar su imagen y de recriminar a sus predecesores lo mal que lo hicieron y que se preocupen de la gente y del turismo, que es una de las principales fuentes de riqueza para la economía local.

Otra playa que tenía una gran afluencia en la localidad, pese a no
contar con el distintivo de bandera azul, es la urbana de O Areal.
Varios vecinos y veraneantes criticaron que entre el argazo acumulado, por un lado, y las piedras, por el otro, están echando a los bañistas de la misma, pues «nin os nosos nenos queren poñen un pe nela”, puntualizaron algunos. En este sentido, señalan que debería volver a hacerse la redistribución de la arena que por los vientos y corrientes se amontona en la zona de la rampa de varada.