Los investigadores ya sospechaban que el terminal de telefonía móvil de Diana Quer fue arrojado desde el viaducto de la AG-11 a la Ría de Arousa

Una de las certezas que los investigadores tenían acerca del teléfono móvil de Diana es que éste había dado señal por última vez a las cuatro de la mañana del día 22 de agosto, tras conectarse a una antena de la zona de Taragoña. Los indicios apuntaron desde ese momento a que el terminal podría haber sido arrojado desde el puente de la Autovía do Barbanza y encontrarse, por tanto, en el fondo de la Ría de Arousa, en algún punto entre Cespón y Taragoña. Cabe recordar que fue en esta zona donde se realizó una batida para intentar hallar algún indicio que pudiese llevar hasta Diana, aunque sin éxito. Sin embargo, en las últimas semanas, los testimonios de varios testigos situaron de nuevo a la joven en el muelle rianxeiro, lo que ahora se une al hallazgo del teléfono en la zona. Por otra parte, las fuentes oficiales hicieron hincapié desde el inicio de la investigación en que los datos procedentes del teléfono móvil estaban siendo minuciosamente analizados por los especialistas con el fin de hallar alguna pista que arrojase luz al caso.