Cuando se confunde negociación con reclamación
Cuando a uno le llega un comunicado como el que recibió este martes la redacción de «loqueyotedigo» como es el de Stop Desahucios de O Barbanza en que hace pública la situación de indefensión de una extrabajadora del Concello de Ribeira, de la resulta muy fácil saber su identidad por los datos que se facilitan, pese omitirse su nombre, debe de ir a las fuentes para confirmar si esa persona, tal y como la conocemos, quiere hacer pública su situación o, al menos, en la forma en que se ha hecho, por mucho que dicha plataforma haya dado traslado del asunto al Valedor do Pobo. Un portavoz detalló que se trata de una mujer que, en su día, sufrió un accidente de trabajo y que ahora “percibe una pequeña prestación por invalidez permanente total para la profesión actual, con un hijo discapacitado a su cargo, y apenas puede pagar el alquiler de su vivienda habitual”. Y añade que esta exempleada le solicitó al Concello ribeirense el pase a la segunda actividad para completar su prestación con un trabajo a media jornada para poder salir adelante.
La redacción de este blog contactó con la afectada, quien dejó claro que, tal y como nos temíamos, no quiso airear su situación y no comparte los métodos que usa esa entidad, desconociendo cuales son sus intenciones, para presentar algo que ella plantea como una negociación como si se tratase de una queja, incluso con el mencionado escrito al Valedor do Pobo: “No quiero entrar en guerra con nadie y confío en llegar a un acuerdo a través del diálogo”, dijo ella. Precisó que si recurrió a la plataforma lo hizo en busca de información y asesoramiento del que carecía, con la finalidad de abrir esa vía de diálogo con la que es su casa laboral, para que no sus responsables no se duerman con sus caso, y subrayó que no pide caridad sino que se respeten sus derechos.
