BOIRO – Denuncian al alcalde por una supuesta prevaricación
El Juzgado Número 2 de Ribeira admitió a trámite la acusación relacionada con la no ejecución de una demolición de un muro que se levantó careciendo de licencia municipal y decide abrir diligencias previas
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Ribeira admitió a trámite la denuncia y abre diligencias previas contra el alcalde de Boiro por un supuesto delito de prevaricación administrativa. La misma fue presentada por el representante legal de una comunidad de vecinos del lugar de Cimadevila en relación a la inacción por parte del máximo mandatario local al no procederse en un periodo de cuatro años a la ejecución subsidiaría de la demolición de un muro perimetral que carece de licencia y tampoco a la imposición de multas coercitivas.
Según pudo saber la redacción de «loqueyotedigo», los hechos se remontan al 18 de diciembre de 2010, cuando la junta de gobierno local del Concello boirense, que en aquel momento presidía el nacionalista Xosé Deira, le denegó la licencia solicitada a principios de ese mes por la empresa Foelca para levantar un muro perimetral, por entender que la construcción excedía el volumen admisible en suelo rústico y afectaba a la servidumbre de protección de aguas. Teniendo en cuenta que la obra se siguió ejecutando pese a carecer de autorización administrativa, la Alcaldía de Boiro dictó el 21 de febrero de 2011 una resolución por la que se le otorgó un plazo de tres meses a la citada compañía para que procediera a la demolición de dicho cierre.
Transcurrido ese plazo, el denunciante señala que la inactividad del Concello boirense, con Juan José Dieste al frente, “fue absoluta”, por lo que se solicitó por escrito una decena de veces la ejecución forzosa de la resolución firme dictada por el alcalde, recibiendo la callada por respuesta en todas las ocasiones “y a día de hoy no se adoptó ninguna medida”, precisó. Añade que si el empresario al que se requiere la demolición no atiende esa reclamación, es el Concello quien lo debe asumir de manera subsidiaria, pasándole luego la factura al particular. Además, puntualiza que mientras no se procedía a la demolición del muro perimetral se debieron interponer multas coercitivas mensuales de 1.000 a 10.000 euros hasta su ejecución. Pero, insiste en que transcurridos 4 años ni Foelca procedió al derribo ni, lo que entiende más grave, por parte del Concello se procedió a la mencionada ejecución subsidiaria ni la imposición de multa alguna.
EXPEDIENTE PARALIZADO DE MANERA TÁCITA
La parte denunciante indicó que se entrevistó en varias ocasiones con el aparejador y secretario municipal, así como con el concejal de Urbanismo, quienes reconocieron en presencia de testigos que el expediente se encuentra “paralizado” de manera tácita. Y añadió que la denuncia de prevaricación por omisión se dirige contra el alcalde y a los funcionarios que resulten responsables de los hechos. El denunciado puede impugnar dicho auto judicial mediante un recurso de reforma en los tres días siguientes a la comunicación del mismo, o bien con un recurso de apelación en los cinco días siguientes.
La juez atiende a las peticiones del denunciante para que se libre oficio al secretario municipal de Boiro para que remita un informe acerca de las actuaciones llevadas a cabo por el Concello boirense en relación a la ejecución de la demolición del muro construido sin licencia por Foelca desde la mencionada resolución de la Alcaldía de 2011 que acordó esa medida. También pide que informe de los escritos y peticiones presentados por el denunciante ante el Ayuntamiento y, en su caso, contestación a los mencionados escritos. Y le demanda que certifique las causas o motivos opor los que no se procedió la ejecución subsidiaria y tampoco a la imposición de multas coercitivas. Otra petición sobre la que aún no se ha pronunciado la juez tiene que ver con el hecho de que declaren el aparejador municipal en calidad de testigo y el alcalde de Boiro como investigado.

