RIBEIRA – Los padres de Deán Grande aseguran que les prometieron habilitar una parada del bus escolar
Los padres de los alumnos del barrio ribeirense de Deán Grande, que están adscritos al colegio de Palmeira, recibieron como una bofetada la denegación, por parte del jefe territorial de Educación, Indalecio Cabana, de las dos paradas de transporte escolar solicitadas para que se recuperasen. De hecho, tras tener conocimiento de la resolución del jefe territorial de Educación, manifestaron que tenían la confianza de que les habilitasen la que hay bajando hacia Fontao, máxime cuando la responsable de servicios complementarios le confirmó a una madre que tendrían esa parada. E indicaron que iban a apuntarlos para que cogieran el autobús escolar en ese sitio.
Para que ello se pudiera hacer se hacía necesario que sacasen a nueve niños que, aunque no tienen derecho a usar el transporte, cuentan con autorización especial para ello. Aún así, no entrarían todos los niños de Deán Grande, por lo que sería necesario buscarle una solución. Con esta nueva situación, que supone volver al principio, sin que de nada sirvieran las palabras del alcalde en relación a que estaba todo solucionado, los padres no saben lo que hacer, pero están convencidos que no se van a quedar de brazos cruzados. De primeras, avanzan que presentarán un recurso de alzada, al que tienen derecho, ante el conselleiro. Del mismo modo, consideran que lo que están haciendo con ellos supone una discriminación, que relacionan con el hecho del «abandono do medio rural, pese a que estamos moi preto do centro da cidade».
Los padres afectados por esta situación le responden a Indalecio Cabana que puede que las paradas solicitadas estén a 400 metros de las otras que funcionan con referentes para Deán Grande, pero también le dicen que «omite que a distancia entre esas dúas paradas é de 1.300 metros, mentres que na Avenida da Coruña as paradas máis distanciadas entre si están separadas entre 200 e 300 metros». Los progenitores están a la espera de poder reunirse con el alcalde de Ribeira, Manuel Ruiz, y en función de lo que allí suceda lo analizarán entre ellos para estudiar la posibilidad de adoptar medidas, que podrían incluir algunas protestas, para las que ya empezaron a surgir algunas iniciativas ciertamente creativas y que deben hacer reflexionar a los responsables de Educación.
Le recriminan al jefe territorial, Indalecio Cabana, que aplique a su antojo el decreto que impide hacer desviaciones o nuevas paradas en distancias inferiores a dos kilómetros, “pois modificaron a do colexio Frións para recoller nenos de A Conlleira, Deán Pequeno e As Sidreiras pese a que nos están adscritas a ese centro educativo, e tivemos que ser nos os que lle advertísemos do erro no que estaban coa zonificación”. Y dicen que siguen esperando desde junio una entrevista con él, después de las reiteradas solicitudes, de las cuales la última tuvo lugar hace unos días.
Otro de los pasos que van a dar los padres de Deán Grande pasan por solicitar el apoyo de la Confederación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Galicia para poder modificar la normativa que impide que dos hermanos, uno que cusa Educación Infantil el otro Primaria, no tengan derecho a los servicios complementarios, como el transporte, pese a ir al mismo centro educativo cuando esos ciclos están adscritos a colegios diferentes. En este sentido, le recriminan a los responsables educativos que no sean ellos los que promuevan ese cambio, «ao ser eles a quenes se lles enche a boca de falar da conciliación familiar, pero non fan nada para facilitala, nin promovela». En este sentido, sostienen que debe impulsarse el reagrupamiento de hermanos en un mismo centro y que tengan derechos a los servicios complementarios.

